El astro boricua Ricky Martin rechazó enfáticamente las acusaciones de violencia de genero que llevaron a las autoridades emitir una orden restrictiva en su contra.
Aunque la policía hizo notar que no se le ha acusado de ningún delito, trascendió que supuestamente es su sobrino quien solicitó la orden ante las autoridades por la presunta violencia.
La policía dio a conocer el sábado 2 de julio que una juez había emitido una orden en contra de Martin.
Las autoridades que intentaban entregar el documento no pudieron localizar al cantante en la localidad puertorriqueña de Dorado, donde reside.
La orden se emitió en virtud de la ley de violencia doméstica de Puerto Rico, y el portavoz policial Axel Valencia declaró que no podía dar más detalles, incluyendo quién la había solicitado.
Martin dijo en Twitter la noche de este domingo que la orden «se basa en alegaciones totalmente falsas» y que enfrentará el proceso «con la responsabilidad que me caracteriza».
» Agradezco las innumerables muestras de solidaridad y las recibo con todo mi corazón», añadió.
Señaló que no haría más comentarios al tratarse de un asunto jurídico en curso.
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